Cae la Cruz de los caídos de Agirleta

En el alto de Santo Domingo, (Artxanda)
"No es cierto, señora. Como bien sabe Ud., en nuestro propio barrio de Irala quedan todavía dos nombres de calle, que los impuso el Alcalde franquista Joaquín Zuazagoitia" 
Desde junio del pasado año han ido cayendo reminiscencias de la invasión de Bilbo por las fuerzas franquistas: la escultura de los soldados nacionales en el cementerio de Derio, el águila y la leyenda del escudo en el frontispicio de la Agencia Tributaria de Moyúa. Y también va a caer la Cruz de los Caidos de Agirleta a petición de los grupos memorialistas, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, esperemos que antes del 81 aniversario de la toma. Lo ha decidido el Ayuntamiento.
Pese a sus diez mtrs. de altura, pasaba desapercibido por encontrarse en un recodo, a poco de girar en el alto de Sto. Domingo hacia Artxanda. LLeva un escudo con un par de aguiluchos bajo una corona, y la fecha de la Victoria 1937 junto a otras dos de batallas carlistas. Se erige en un altozano con una escalinata de acceso, rodeada de setos y césped bien cuidados, por cierto; suponemos que por los servicios de jardinería municipales. En 1971 el Ayuntamiento sufragó los gastos de una motobomba, para que no faltara el riego al entorno. Una cruz de idéntica factura, aunque sin escudo, se yergue en el acantilado del alto de Artabide de Ondarroa, camino de Lekeitio.
En este caso, lleva los nombres de los marinos del bando nacional muertos en combate. Se cumple también un año que se derribaron la Cruz de Larrabetzu y la de los italianos en la cumbre bocinera de Sollube, por acuerdo de las instituciones. Este monumento, como tantos otros, no figura en la relación de símbolos del franquismo recopilados por los profesores de UPV, pero ahí estaba bien enhiesto.
Nos congratula la decisión del Consistorio de derribarlo sin más, pero discrepamos de la concejal Gotzone Sagarduy cuando afirma: "se va a eliminar así el último vestigio del franquismo". No es cierto, señora. Como bien sabe Ud., en nuestro propio barrio de Irala quedan todavía dos nombres de calle, Reyes Católicos y Alto de Somosierra, que los impuso el alcalde franquista Joaquín Zuazagoitia, el año 1951, para conmemorar el XII de la Victoria. En esta revista transcribíamos copia del acuerdo municipal.
En honor a la memoria del Centenario insistimos que se devuelva a la calle el nombre que le puso el Sr. Irala, "Avda Principal".
De otra forma, la negativa del Ayuntamiento no impedirá que se designe a dicha calle como LA PEATONAL que es.